Hay personas que prefieren salir
a la calle en busca de qué oportunidades se puedan presentar, quien apura cada
segundo apartando y revisando qué obstáculos le puedan traer sorpresas, quien
lucha contra tempestades por defender sus motivos para no permanecer sentado.
Yo me paso la vida disfrutando de mi libertad, con la poca estabilidad emocional que eso conlleva, y ahí ando. De todas formas, tampoco hay nada bueno dónde elegir meter la mano, para proclamar perpetuidad o jurar amor eterno, sin escoger tan sólo manzanas podridas. Y tal vez pueda dar impresión de que con esto me defina ser poco amigo de lo formal, pero es imposible planear la forma de reaccionar con cada relación y vínculo que se desee tener. Quiero complicidad, pero hasta cierto límite. No quiero nada obligado, nada pactado, nada calculado, nada artificial.
Lo mejor es vivir tal cual se te antoje dentro de tus posibilidades, por supuesto, sean cuales sean las consecuencias. Habrá días en que se gane y otros que, inevitablemente, no se tenga tanta suerte.
Hay personas que nacen para buscar y otras que prefieren encontrar. Pero la cuestión no es buscar sino esperar para encontrar o esperar para ser encontrado por alguien que busca. Porque buscar y encontrar, de la manera que sea conjugado, siempre lleva a lo mismo.
Creo que cuando la suerte esta por medio... buscar y encontrar seon lo mismoc o algo muy parecido.
ResponderEliminarSaludos ;)
Mh... Ser encontrado... Sí, eso me gusta, la verdad, yo soy de las que encuentra sin buscar, y de las que es encontrada sin ser buscada :)
ResponderEliminarGracias por pasarte por mi blog, voy a cotillear el tuyo un poco más. Te sigo ;)
yo busco, encuentro, y espero encontrar
ResponderEliminarbuena reflexión final, si señor.
ResponderEliminargracias por tu comentario :) te sigo :)
Ojala que si busco, encuentre pero todo sea la suerte...
ResponderEliminar*Besos