jueves, 28 de abril de 2011

« soplo atlántico »

Escucho el bravío del mar, el cantar de los pájaros en la costa y el quejido de las rocas y la sal cuando se besan. El sol ejecuta tan bien su función que agrieta las piedras. Me embriaga el olor de la brisa fresca que acaricia mi rostro. Se respira paz, orden, equilibrio.

2 comentarios:

  1. Muy chulo el blog. Te sigo ;)
    http://fullofbeautifulmistakes.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. Cuanto se lleva el mar con la fuerza de sus mareas... arrastra la ansiedad, los miedos y la apatia visceral. El mar es balsamo para el alma.
    Quien vive cerca de el, ya no puede abandonarlo.
    Precioso texto.
    Saludos ;)

    ResponderEliminar