A pesar de que no estoy seguro de
tu existencia, te recuerdo cada noche, cuando me toco pensando en ti. Y a pesar
de que nunca te he visto sé que estás aquí, noto tu presencia cerca y para mí.
Despierto y sé que aunque no estás a mi lado, has dormido conmigo, que el sudor
que me moja también pertenece a ti. Sé que has nacido. Sé que has sido
concebido para mí, sé que pronto podré sentir que me amas como yo a ti. No me
cabe duda de que algún día alcanzaré el clímax con el tacto de tus manos, que
hoy no se distinguen entre las mías.
Mientras llegas serán mis dedos
quien sellen mis labios, que gritan de placer simulando los tuyos, me abrazaré
la espalda y seguiré mirando al espejo.